Sonido Hebers: la historia del “incontenible” sonidero del Edomex que conquistó México
¡La Mejormanía se puso sabrosa! Nos fuimos de lleno al universo sonidero con Rodolfo Ramírez de Sonido Hebers 35 años de fiesta, tornamesas y legado.
En otro episodio más de La Mejormanía conducido por Adrian Sierra “La Bomba”, nos acompañó Rodolfo Ramírez, propietario de Sonido Hebers, quien nos contó todo sobre su trayectoria artística y cómo surgió uno de los más grandes sonideros del Estado de México.
En el corazón del Estado de México, específicamente en San Andrés, Jaltenco, nació hace 35 años uno de los proyectos más representativos del movimiento sonidero nacional: Sonido Hebers, liderado por Rodolfo Ramírez. Lo que comenzó como un sueño de infancia, se ha convertido en uno de los sonidos más respetados y vigentes de la escena sonidera.
Todo inició con la curiosidad de un niño. Rodolfo, junto con su primo, jugaba al “sonidito” usando cajas de verduras y huacales como si fueran bocinas, simulando los equipos de sonido que veían en los bailes de barrio. A pesar de no provenir de una familia con tradición sonidera, la pasión por la música lo llevó a dar sus primeros pasos como promotor de eventos, organizando bailes en su comunidad.
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El nacimiento de Sonido Hebers en 1990
Fue en 1990 cuando formalmente surgió el proyecto llamado Sonido Hebers. Con pocos recursos y sin conocimientos técnicos, Rodolfo comenzó a invertir en equipo, muchas veces pagando el “precio de la novatada”, y aprendiendo a prueba y error. Sin embargo, su entrega y dedicación lo mantuvieron firme en su propósito: convertirse en uno de los mejores.
“Yo nací para ser sonidero y ese era mi destino”, afirma con orgullo Rodolfo. Su trayectoria ha sido testigo de la evolución del sonido en México, desde las bocinas en forma de cubo, hasta los modernos equipos con trompetas, roperos y luces inteligentes. Su filosofía es clara: “si quieres salir en la película, tienes que estar actualizado”.
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Renovación constante: la clave del éxito
Rodolfo ha vivido tres generaciones dentro del movimiento sonidero y sabe que para mantenerse vigente es necesario renovarse constantemente. “No solo se trata del equipo; también hay que actualizarse en la locución, en la forma de llevar los eventos y, sobre todo, en la música”, comenta.
La historia de Sonido Hebers no solo inspira a quienes forman parte de la cultura sonidera, sino que también demuestra cómo la pasión, el esfuerzo y la constancia pueden convertir un juego de niños en una carrera de décadas.
Con 35 años de trayectoria, Sonido Hebers sigue siendo una figura clave del universo sonidero mexicano, llevando alegría, ritmo y tradición a cada baile donde se presenta.