Un estudio realizado por investigadores españoles ha revelado que los hornos de microondas pueden albergar bacterias capaces de resistir la radiación de microondas, las altas temperaturas y la desecación. Estas bacterias pueden encontrarse tanto en microondas domésticos como en los de uso compartido y de laboratorio.
Principales bacterias encontradas
Los investigadores analizaron 30 microondas y encontraron cepas pertenecientes a géneros como Bacillus, Micrococcus y Staphylococcus. Además, en los microondas domésticos se localizaron bacterias como Acinetobacter y Klebsiella, mientras que en los de uso compartido también se encontraron Enterobacter y Paenibacillus.
Resistencia a la radiación y las altas temperaturas
A pesar de que la irradiación por microondas se ha utilizado para reducir la presencia de microorganismos, se descubrió que algunas bacterias pueden resistir estas condiciones. Las cepas resistentes solo se encontraron en microondas de laboratorio, lo que sugiere la necesidad de más investigaciones para comprender cómo sobreviven a estas condiciones extremas.
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Importancia de la higiene en el hogar
La presencia de estas bacterias subraya la importancia de mantener prácticas de limpieza regulares en los microondas y otras superficies del hogar. La limpieza adecuada con desinfectantes apropiados es esencial para prevenir posibles riesgos para la salud.