Según la Biblioteca Digital de la Medicina Tradicional Mexicana, el jengibre ha sido valorado por sus propiedades medicinales, siendo utilizado desde el siglo XVI para tratar dolores de estómago, mejorar la digestión y como antivomitivo.
A lo largo de los siglos, ha sido recomendado para una variedad de afecciones, incluidos los problemas gastrointestinales, el asma e incluso como afrodisíaco. El jengibre se ha utilizado en tradiciones medicinales de regiones como Oaxaca, Puebla y Tabasco en México, para tratar desde la tos hasta el reumatismo. Botánicamente, el jengibre es una hierba nativa del sureste de Asia, que se adapta a diversos climas y se cultiva en muchos países.
Cómo preparar agua de jengibre
El agua de jengibre, una bebida obtenida al hervir trozos de jengibre fresco en agua, se ha convertido en un elixir de salud en muchas culturas gracias a sus múltiples beneficios. Este líquido, rico en nutrientes y bioactivos, ofrece una amplia gama de ventajas terapéuticas y preventivas para el organismo. Uno de los beneficios más apreciados del agua de jengibre es su potente efecto antiinflamatorio.
Te podría interesar
Gracias a los compuestos bioactivos, como el gingerol, esta bebida puede aliviar el dolor y la hinchazón asociados con condiciones inflamatorias, como la artritis. Además, funciona como un analgésico natural, ofreciendo alivio frente a dolores musculares y de cabeza.
Propiedades del agua de jengibre
Por otro lado, el agua de jengibre puede enriquecerse con diversos sabores, como limón, jamaica, guayaba o incluso hierbas como la menta y endulzarse con miel. La capacidad del agua de jengibre para mejorar la digestión es otro de sus grandes atractivos. Esta bebida estimula la producción de saliva y bilis, facilitando la descomposición de alimentos y la absorción eficiente de nutrientes. También puede aliviar malestares gastrointestinales, reducir la hinchazón y combatir la indigestión.
Te podría interesar
En cuanto a la pérdida de peso, el agua de jengibre juega un papel importante al aumentar el metabolismo y promover la sensación de saciedad, lo que puede conducir a una reducción de la ingesta calórica y, por ende, a la pérdida de peso. Los efectos antioxidantes del jengibre son igualmente apreciados.
Los antioxidantes presentes en esta bebida luchan contra los daños causados por los radicales libres, lo que previene el envejecimiento prematuro y reduce el riesgo de enfermedades crónicas como la arteriosclerosis, la artritis reumatoide y el enfisema. Además, el agua de jengibre beneficia la salud cardiovascular al ayudar a reducir los niveles de colesterol malo y mejorar la circulación sanguínea, contribuyendo así a prevenir enfermedades del corazón.