El planeta alberga una diversidad sorprendente de especies, algunas de las cuales desafían los límites de la longevidad. Entre ellas destaca el Tiburón de Groenlandia (Somniosus microcephalus), catalogado como el animal más longevo conocido según recientes hallazgos científicos. Este imponente depredador, que puede alcanzar los siete metros de longitud, ha capturado la atención de biólogos y científicos marinos por su capacidad para sobrevivir durante más de cinco siglos.
En enero de 2024, investigadores de la Universidad de Florida tuvieron un encuentro excepcional frente a las costas de Belice: "Algo muy grande se enganchó a nuestro palangre mientras marcábamos tiburones tigre", explicó uno de los biólogos. Este encuentro accidental reveló la presencia de un ejemplar de Tiburón de Groenlandia en aguas cálidas, lejos de su hábitat gélido natural.
Un descubrimiento que desafía las creencias científicas
El tiburón, descrito como "algo propio de la prehistoria" por los biólogos, fue escaneado brevemente para determinar su edad aproximada: 520 años, consolidándose como el vertebrado más longevo registrado hasta ahora. Este hallazgo desmintió el mito de que las tortugas son los animales más longevos, al menos en términos de vertebrados marinos.
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Los científicos han evitado tomar muestras de ADN para proteger el bienestar del animal: "No queríamos perturbar su ritmo biológico ni causarle estrés", señalaron los investigadores. Este acto de cautela refleja el respeto por la naturaleza y el deseo de comprender mejor las características únicas de este gigante marino.
El Tiburón de Groenlandia, conocido por su comportamiento somnoliento y su habilidad para nadar a profundidades extremas de hasta 2,000 metros, continúa siendo objeto de estudio y admiración en la comunidad científica. Su longevidad excepcional plantea nuevas preguntas sobre la biología y la adaptación de las especies marinas a lo largo de milenios.