La crema de avellana con aditivos cancerígenos que NUNCA debes usar, según el Poder del Consumidor
Esta crema de avellana tiene peligros ocultos para la salud por lo que se recomienda no consumir.
La crema de avellana es un alimento popular en muchos hogares, pero no todas las opciones disponibles en el mercado son saludables. De acuerdo con un análisis del Poder del Consumidor, la marca Cremino contiene ingredientes perjudiciales para la salud, incluyendo un aditivo relacionado con el cáncer.
Este producto destaca por su alto contenido de azúcares y grasas saturadas, superando los límites recomendados por organismos de salud como la OMS y la NOM-051. El Poder del Consumidor alerta sobre los riesgos de su consumo frecuente.
Ingredientes que afectan la salud
Uno de los principales problemas de la crema de avellana Cremino es su elevado contenido de azúcares. Cada porción de 30 gramos contiene más de 12 gramos de azúcar, lo que equivale a casi la mitad de la ingesta diaria recomendada. Además, posee un 25.7% de grasas saturadas, lo que contribuye a problemas como obesidad y enfermedades cardiovasculares.
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Sin embargo, el ingrediente más preocupante es el TBHQ, un aditivo con posibles efectos cancerígenos y mutagénicos. Su consumo en dosis elevadas puede provocar efectos citotóxicos y genotóxicos, por lo que se recomienda evitar productos que lo contengan. Descubre aquí más información sobre este tipo de aditivos y sus efectos.
Alternativa saludable: crema de avellana casera
Ante estos riesgos, El Poder del Consumidor propone una receta casera de crema de avellana libre de aditivos peligrosos. Con ingredientes naturales y accesibles, es posible preparar una versión más saludable en casa.
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Para hacerla, se necesitan 100 g de avellanas, 100 g de almendras, 15 g de aceite vegetal, 100 ml de leche, 15 ml de esencia de vainilla, 10 g de azúcar mascabado y 10 g de cacao en polvo. Con un proceso sencillo de tostado y triturado, se obtiene una crema sin conservadores y más segura para el consumo.
Evitar productos con TBHQ
El aditivo TBHQ se encuentra en diversos productos ultraprocesados y puede representar un riesgo a largo plazo. Su consumo ha sido vinculado con daños celulares y alteraciones en el ADN. A pesar de su aprobación en pequeñas dosis, expertos en salud sugieren optar por alternativas naturales y reducir la ingesta de alimentos con conservadores artificiales.
La crema de avellana Cremino no es una opción recomendable debido a su alto contenido de azúcares, grasas saturadas y, sobre todo, por la presencia de TBHQ, un aditivo potencialmente cancerígeno.
En su lugar, se recomienda elegir alternativas más naturales, como la crema de avellana casera. Al conocer los ingredientes de los productos que consumimos, es posible cuidar la salud y evitar sustancias que puedan ser perjudiciales a largo plazo.