El Fondo Nacional para el Consumo de los Trabajadores (Fonacot) es una de las entidades de México que ofrece créditos a los trabajadores formales. Su carácter es público y tiene como objetivo aumentar el poder adquisitivo de los afiliados, para que puedan obtener bienes y servicios de manera accesible.
Si bien la entidad busca la estabilidad económica de los trabajadores, a través de créditos con tasas de interés accesibles, lo cierto es que todas las personas no están exentas de contraer algún tipo de deuda. Frente a estos casos, existen 2 motivos por los cuales el Fonacot puede cancelarla.
¿Cuáles son las ventajas de los créditos Fonacot?
Con el objetivo de facilitar el acceso al crédito y promover el bienestar de los trabajadores y su estabilidad económica, el Fonacot se adapta a las necesidades de cada afiliado. De esta manera, una de las ventajas es que el fondo puede otorgar hasta 50,000 pesos (equivalentes a 4 meses de sueldo) y permite su pago en cómodas cuotas descontadas directamente de la nómina.
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Otras de las ventajas es que minimiza el riesgo de retrasos y ofrece algunas de las tasas de interés más competitivas del mercado. De esta forma, se traduce en un ahorro significativo para el afiliado en el costo total del crédito. Este último variará según el plazo del préstamo y el porcentaje de descuento aplicado a la nómina.
Las 2 razones por las que Fonacot puede cancelar tu deuda de crédito
Además de brindar beneficios financieros para las personas trabajadoras formales, el Fonacot puede ayudar al afiliado a asegurar la liquidación total de su deuda. Este procedimiento se realiza a través del seguro que ofrece la entidad.
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De esta forma, el fondo puede considerar cancelar la deuda del trabajador, si se encuentra alguna de las siguientes circunstancias:
- Fallecimiento
- Incapacidad o invalidez total y permanente
Cabe mencionar que, según la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), es recomendable mantener un nivel de endeudamiento por debajo del 30% de los ingresos. Esto garantiza que los pagos mensuales de los préstamos no superen dicho porcentaje y se consiga la estabilidad financiera.