El tinaco es un elemento indispensable en cualquier hogar, ya que nos permite almacenar mucha agua para uso doméstico. Sin embargo, con el paso del tiempo, los tinacos pueden deteriorarse y presentar problemas que ponen en riesgo nuestra salud sobre todo si son de un material en específico.
¿Cuáles son los tinacos que más dañan la salud?
Anteriormente, los tinacos solían ser de este material y en ese momento no se conocían los verdaderos daños que podían ocasionar. Y aunque actualmente este tipo de tinacos son cada vez menos comunes, hay personas que todavía conservan, nos referimos a los tinacos hechos de asbesto.
Se ha dado a conocer que este material es producido a partir de seis minerales naturales fibrosos, y aunque estas fibras son resistentes y muy utilizadas, se descubrió que dicho material es muy peligroso para la salud. Supuestamente, el peligro radica en que el asbesto provoca asbestosis, una enfermedad crónica de los pulmones causada por la inhalación de fibras de amianto.
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Pero este no es el único mal que puede causar en la salud, ya que también puede provocar cáncer de estómago, de faringe, de ovario y colorrectal, según información del Instituto Nacional del Cáncer (NIH).
¿Qué tipo de tinaco debo comprar?
Para evitar estos problemas es necesario cambiar tu tinaco a un material que sea amigable con la salud. Toma en cuenta estas recomendaciones:
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- Material: Los tinacos pueden ser de diferentes materiales, como plástico, metal o concreto. Es importante elegir un material que sea resistente, duradero y adecuado para el clima de tu zona.
- Capacidad: La capacidad del tinaco debe ser suficiente para satisfacer las necesidades de tu hogar.
- Marca: Es importante elegir un tinaco de una marca reconocida y confiable. Asegúrate de que el tinaco esté certificado por las normas de calidad correspondientes.
¿Cuándo es necesario cambiar un tinaco?
Aquí te dejamos 5 señales que indican que debes cambiar tu tinaco lo antes posible:
- Si tu tinaco presenta fugas o filtraciones, es una señal clara de que está dañado y necesita ser reemplazado. Las fugas pueden desperdiciar agua y provocar humedades en tu hogar, lo que puede generar problemas de salud como moho y hongos.
- Si el agua que sale de tu tinaco tiene un color o sabor extraño, es posible que esté contaminada por bacterias, hongos u otras sustancias nocivas. Beber o utilizar agua contaminada puede provocar enfermedades gastrointestinales, alergias y otros problemas de salud.
- Si observas sedimentos, como arena o lodo, en el fondo de tu tinaco, es una señal de que no se está limpiando adecuadamente y que el agua está contaminada. Beber o utilizar agua con sedimentos puede provocar problemas digestivos y otras enfermedades.
- Si tu tinaco presenta grietas o fisuras, es una señal de que está estructuralmente dañado y puede colapsar en cualquier momento. Un tinaco que se colapsa puede provocar inundaciones en tu hogar y poner en riesgo tu seguridad.
- Los tinacos tienen una vida útil limitada. En general, se recomienda cambiarlos cada 10 o 15 años. Si tu tinaco tiene más de 15 años, es hora de considerarlo para cambiarlo, incluso si no presenta ninguna de las señales anteriores.