En la búsqueda constante para ahorrar, los conductores se preguntan: ¿qué gasta menos gasolina, ir rápido o lento? La respuesta no es tan simple como parece.
Aunque factores como el estado del auto, la altitud y el tipo de combustible influyen, los hábitos de conducción también desempeñan un papel crucial. Aquí te explicamos cuál es la velocidad recomendada para ahorrar combustible y cómo puedes optimizar tu conducción.
La velocidad ideal para ahorrar nafta
Según especialistas, mantener una velocidad constante es clave para reducir el consumo de combustible. ¿Cuál es esa velocidad óptima? Aquí tienes dos referencias:
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- Entre 50 y 70 km/h: a esta velocidad, el equilibrio entre la resistencia del aire y el gasto de combustible es favorable. Si estás en una ruta despejada, ir a esta velocidad puede ser bastante eficiente.
- 90 km/h: La Dirección General de Tráfico (DGT) sugiere que a 90 km/h el motor no realiza tanto esfuerzo, lo que maximiza el ahorro de combustible. A partir de 110 km/h, el consumo aumenta significativamente.
En trayectos largos o autopistas, mantenernos en los 90 km/h es una buena estrategia. Recuerda que la velocidad constante elegida también depende del tipo de camino. Si la ruta está despejada, no es necesario ir tan rápido; en ese caso, ir de 50 a 70 km/h tiene más sentido.
Prácticas que afectan el consumo
Además de la velocidad, otros hábitos influyen en el gasto de nafta:
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- Calentar el motor por más de un minuto: Cada 10 minutos de ralentí, el auto consume 100 ml de combustible.
- Acelerar rápidamente desde un alto: Una aceleración gradual es más eficiente que una brusca.
- Tráfico denso: Aumenta un 15% el consumo de combustible.
- Uso excesivo del aire acondicionado: Puede incrementar el consumo en un 10%.
- Cargar cosas innecesarias en el baúl: Cada 50 kg extras aumentan el gasto de combustible en un 2%.
En resumen, la velocidad adecuada y los buenos hábitos al volante son esenciales para ahorrar combustible. Así que la próxima vez que te preguntes si ir rápido o lento es mejor, recuerda que encontrar el equilibrio es la clave para un viaje más eficiente.