Profeco revela cuáles son los refrescos más dañinos para la salud
Reducir el consumo de refrescos y optar por opciones más saludables puede contribuir significativamente a mejorar la calidad de vida, según Profeco.
México es uno de los países con mayor consumo de refrescos en el mundo. Según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), cada persona consume en promedio 164 litros al año. Este hábito ha sido señalado como un factor clave en el aumento de enfermedades como la obesidad, la diabetes y la hipertensión.
A pesar de las advertencias de expertos y organismos de salud, el consumo de refrescos sigue siendo parte de la rutina diaria de millones de personas. La publicidad, el sabor y el acceso fácil a estas bebidas han contribuido a que sean una opción frecuente en la alimentación de los mexicanos.
Para analizar su impacto en la salud, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizó un estudio en el que evaluó 46 productos disponibles en el mercado. El objetivo fue identificar cuáles contienen los ingredientes más perjudiciales y qué riesgos representan para los consumidores.
Te podría interesar
¿Cuáles son los refrescos más dañinos según la Profeco?
El estudio de la Profeco reveló cuáles son los seis refrescos más perjudiciales para la salud en 2025. Estos productos destacan por su alto contenido de azúcar, edulcorantes y otros aditivos que pueden afectar el organismo a largo plazo. Entre los refrescos señalados están:
- Barrilitos
- Coca-Cola sabor original
- Sangría Señorial
- Sidral Aga
- Ameyal
- Chaparritas
Algunos de estos refrescos contienen grandes cantidades de azúcar, mientras que otros incluyen edulcorantes artificiales y cafeína, lo que los hace especialmente dañinos para niños y personas con problemas metabólicos.
Te podría interesar
¿Cómo identificar un refresco poco saludable?
Para evitar el consumo excesivo de estos productos, la Profeco recomienda revisar con atención las etiquetas. La mayoría de los refrescos tienen como segundo ingrediente más abundante el azúcar, lo que significa que su consumo debe ser moderado.
También es importante prestar atención a la información nutricional. Muchas marcas presentan sus valores en porciones de 200 mililitros, pero los envases más comunes son de 355 mililitros o más. Esto puede llevar a subestimar la cantidad real de azúcar ingerida.
¿Qué alternativas existen al consumo de refrescos?
Si bien los refrescos son una opción popular, existen alternativas más saludables para mantener una hidratación adecuada. Entre ellas se encuentran:
- Agua natural: Es la mejor opción para hidratarse sin consumir azúcar ni aditivos.
- Infusiones frías: Bebidas preparadas con hierbas naturales y sin endulzantes añadidos.
- Aguas frescas caseras: Preparadas con frutas naturales y sin azúcar o con endulzantes más saludables.
- Refrescos sin azúcar aprobados por la Profeco: En su estudio, la Profeco también identificó algunas opciones light que no contienen jarabe de maíz y son menos perjudiciales.